Exposiciones LA SALA: miSelva, de Patricia Fesser

Visita guiada: sábado 27 de diciembre a las 18.00 h
La Sala
miSelva, de Patricia Fesser
Como explica la propia artista, el proyecto intenta combatir la arrogancia y vanidad que muestra nuestra especie humana en su relación con el mundo y su intención es ayudar a establecer un sentido común más cercano a la comprensión y respeto de otras formas de vida. La ciencia, en su estado actual, ya está pudiendo demostrar lo que para muchas culturas y personas siempre ha sido obvio: la forma humana no es la única forma de vida con altas capacidades sociales, sentimentales e intelectuales.
La perspectiva desde la cual nos pensamos como seres superdotados entre las demás especies ha conducido a un abuso que estamos viendo profundamente fallido y carente de sabiduría para con nuestras propias condiciones de vida.
A través de la imagen de las plantas o el animal, Patricia Fesser trata de generar la posibilidad de tomar conciencia de la verdadera jerarquía de la existencia: las plantas nos lo dan todo y animales como la lombriz son infinitamente más importantes que la especie humana para el mantenimiento de las condiciones de vida, ya que sin ella los suelos no hubieran sido fértiles para
que nuestra especie pudiera medrar.
Algunos de los trabajos que forman miSelva, son:
miMonte, un necesario reconocimiento a los árboles y arbustos que forman el paisaje de Bustarviejo, que acoge a la artista, y que nos regala un aire lleno de nutrientes para nuestros cuerpos y también para lo que, siendo lo que sea, hemos dado en llamar espíritu, alma, conciencia.
miMonte está formado por Retratos. Porque son retratos. Retratos de Sujetos que deberían ser de pleno derecho. Por eso estos seres vegetales que forman miMonte aparecen ante la mirada desvinculados del paisaje de fondo, como individuos que son. Sobre fondo blanco. Sobre fondo negro. En alianzas de diferentes.
Una Más. Proyecto de inclusión ecológica.
Tratar de compartir la idea de que nuestra especie es una más, una entre otras, dio lugar a una serie de performances, una sentada protesta, "plantas y yo protestamos". Para transmitir esta idea, era necesario que ellas, las plantas, y yo estuviéramos al mismo nivel. De ahí nació la idea de trasladar nuestra imagen en los mismos términos a un mismo nivel. De estos trabajos surgieron dibujos que, como actores y actrices, participaron en estas performances.
Dibujos.
Algunos dibujos de gran formato que han intervenido en las diferentes performances.
Especies amenazadas
Del tiempo anterior a que todas las especies estuviéramos amenazadas.
Reflexionando acerca de las listas de especies amenazadas que la humanidad venía realizando desde hace algunas décadas y haciendo una ecuación entre éstas y el hecho pictórico, surgió una metáfora visual, que, acompañada del título, pretende recoger el espíritu de los tiempos, el Zeitgeist.
Estas ideas se materializaron en una instalación de 5 cuadros.
Sin embargo, explica la artista, los tiempos han cambiado y no ha llegado a tiempo.
Han sido muchos años trabajando con la idea de que si conseguimos aceptar al 'otro' animal o vegetal como un igual, habríamos logrado una empatía con seres que están alejados de nuestra especie; esto nos permitiría superar el miedo al otro que sucede entre seres humanos.
“Pero no he llegado a tiempo. Son tiempos de genocidio en cada uno de nuestros teléfonos. De día y de noche. Genocidio retransmitido. Ante esta situación, no es posible otra cosa que no sea reflexionar sobre la capacidad humana para, amparándose en determinados argumentos, mutilar niños y niñas, asesinar a sus padres y madres, destruir sus hogares, sus animales, sus vegetales. Destruirlo todo. Entender que esta destrucción ha sido y es el método principal con el que la cultura occidental ha establecido y mantiene sus civilizaciones del norte-global”.
Para finalizar, extraemos un fragmento de la entrevista a la artista realizada por Walter C. Medina para Nueva tribuna, el 29 de noviembre del 2025, en el que Patricia Fesser reflexiona sobre el aspecto formal de su trabajo:
“(…) Como he dicho, me es muy importante ese encuentro entre lo que presento y la persona que se acerca a verlo, por eso elijo predominantemente el formato de la instalación, que permite crear un espacio para ser recorrido con el cuerpo, y las dimensiones del gran formato, que permiten un encuentro “entre iguales”. El hecho de servirme de la pintura y el dibujo tiene su origen en dos aspectos, uno pragmático y otro de valores: el aspecto pragmático es que es la forma más económica de producir arte de gran formato; podría haber realizado fotografías, sería otra conversación que podría ser interesante, pero sin presupuesto era inviable; esta elección también tiene que ver con los valores que he mencionado, pues creo en hacer presente en el ámbito del arte contemporáneo la tradición de la pintura y el dibujo, transmitir esa factura de lo artesanal, lo hecho a mano, que permite, además, sentir el tiempo que una persona emplea en darle forma artística a una idea. Es como cuando veo un concierto de música, me imagino a esas personas ensayando en la soledad de su cuarto interminables horas, corrigiendo, enfrentándose a limitaciones y superando todo ello para podernos ofrecer algo profundo, fruto de un proceso personal, y por ello bello (…)”.
Patricia Fesser (1969, Madrid) es licenciada en Bellas Artes (Universidad Complutense, Madrid, y Universität der Künste, Berlín) y Máster en teoría y práctica del arte contemporáneo (Universidad Complutense). Ha mostrado su trabajo tanto en entornos académicos, como en el marco de movimientos sociales a través de proyectos autogestionados en Madrid y Berlín.
Visita guiada: sábado 27 de diciembre a las 18.00 h
Transporte público disponible, autobuses interurbanos: líneas números 191 Madrid (Plaza Castilla) - Buitrago, 194 Madrid (Plaza Castilla) - Rascafria, 195 Madrid (Plaza Castilla) - Braojos, 196 Madrid (Plaza Castilla) - La Acebeda, 197-B Torrelaguna - El Berrueco - La Cabrera.
Parada muy próxima al Centro de Humanidades.
En coche particular: Salida 60 de la A1 Madrid-Burgos, tomando dirección La Cabrera. Estamos situados a unos 35/45 minutos de Madrid.