Avería del micrófono del teléfono móvil
El consumidor:
Lleva su teléfono móvil a reparar dentro del periodo de garantía, ya que el micrófono ha dejado de funcionar por una avería. Aclara que se ha dado un uso normal al teléfono y que no ha recibido ningún golpe ni se ha mojado. Reclama la reparación o un teléfono móvil de las mismas características que el averiado.
La empresa:
Alega que el consumidor ha hecho un mal uso del teléfono y que la avería se produce cuando queda poco tiempo para que expire el periodo de garantía, debiendo aplicarse la presunción de defecto de origen de fabricación dentro de los seis primeros meses de compra.
El colegio arbitral:
Admite la reclamación del consumidor, entendiendo que no queda probado que los daños del teléfono se hayan producido por un mal uso, por lo que insta a la empresa a repararle el teléfono o entregarle uno de las mismas características o superior.