La Colección. Museo Picasso - Colección Eugenio Arias
Cerámico, dibujo y obra gráfica
El núcleo principal de la colección está formado por obras regaladas y dedicadas por Picasso a Eugenio Arias. Este conjunto, de naturaleza muy variada, reúne dibujos, obra gráfica, cerámicas, carteles, libros dedicados y otras singulares como una caja de útiles de peluquero pirograbada y una placa de cagafierro.
Forman parte del conjunto, varias fotografías de André Villers, aportadas por Arias al Museo en la década de los noventa y un busto escultórico de Picasso realizado por Francisco Aguilar.
A este núcleo se suman ocho piezas de cerámica procedentes de la colección de la antigua Diputación Provincial de Madrid, que se incorporaron a la colección Arias a finales de la década de los ochenta. Las últimas adquisiciones realizadas por la Comunidad de Madrid han sido dos estampas en el año 2005, a través del 1% cultural, tres fotografías de David Douglas Duncan en el año 2011 y dos donaciones de obras. La colección actualmente se compone de un total de 75 piezas.
La mayor parte de las piezas pueden ser datadas con precisión entre octubre de 1948 y diciembre de 1972
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Cerámica
En 1946, Picasso establece relación con el taller de alfarería Madoura en Vallauris, cuyos propietarios, Georges y Suzanne Ramié, se habían propuesto revitalizar las antiguas tradiciones ceramistas.
A partir de 1947, mientras reside en el Sur de Francia, Picasso acude regularmente a trabajar en el taller Madoura, realizando innumerables piezas de cerámica, un medio que alcanza una auténtica renovación y una inusitada calidad artística en sus manos, elevando lo que había sido tradicionalmente una forma de artesanía al rango de auténtica obra de arte.
En su aniversario Picasso le regaló a Arias dos bacías de barbero, que constituyen un homenaje tanto a la profesión, a través de la cual se fraguó la amistad entre ambos, como a su país natal: la fiesta nacional y el Quijote.
Otras piezas de cerámica pintada modelada o impresa con diversas formas representan escenas taurinas o motivos muy esquematizados.
Dibujos
La colección de dibujos, de gran fuerza creativa, abarca una gran diversidad de temas: la tradición mediterránea, la fiesta taurina, referencias a Rembrandt y personajes ligados a su tiempo, motivos simbólicos como la paloma de la paz, retratos, entre los que destaca el de Jacqueline, así como rostros masculinos, que pudieran ser interpretados como autorretratos.
Picasso, que había asistido muy de cerca al nacimiento del caligrama con su amigo el poeta Guillaume Apollinaire funde en algunos dibujos tipografía e imagen pintada.
Los dibujos, a lápiz de color, pastel, tinta, aguada, rotulador o bolígrafo, aparecen generalmente en las portadas o guardas de libros que documentan la vida y obra de Picasso (David Douglas Duncan, Edward Quinn, Hèléne Parmelin, Jaime Sabartés, Georges Bloch y Jean Leymarie), carteles o catálogos de exposición de su obra (Galería Louise Leiris y Sala Gaspar).
Los dibujos también figuran en libros ilustrados por el artista y en otros que reflejan la actividad de Picasso como escritor y poeta (Trozo de Piel y El Entierro del Conde de Orgaz).
Obra gráfica
En la estampa, el talento artístico y la maestría del oficio del artista se complementan de forma ejemplar para dar testimonio directo de sus sentimientos e ideas. Picasso se sirvió de una extraordinaria variedad de técnicas gráficas sin haber recibido una preparación propiamente dicha, si bien contaba con la colaboración de destacados impresores, como los hermanos Aldo y Piero Crommelynck.
En la temática de la obra gráfica aquí reunida (litografía, linografía y grabado sobre celuloide) prevalece el antifranquismo, en la cual la paloma de la paz aparece utilizada con un claro significado de compromiso político con la defensa de los derechos humanos y la reivindicación de libertad para los presos políticos españoles. Incluso el retrato de la madre de Eugenio Arias, Nicolasa Herranz, fue realizado, según Arias, con motivo de la petición de amnistía para los españoles exiliados. Peculiar resulta su faceta como ilustrador de paisajes a punta seca del minúsculo libro de poemas de Jacqueline Roque titulado Temperature.
La colección de carteles y reproducciones realizados por impresión fotomecánica es numerosa y de diverso asunto: el tema del pintor y la modelo y la Antigüedad clásica, ambos de innegable sentido erótico, carteles para anunciar el Congreso Mundial para el Desarmamento y la Paz y otros para presentar exposiciones de su obra en las Galerías Lucie Weill y Madoura.
La carpeta Carnet de la Californie contiene el tema del taller del artista en su villa La Californie y retratos de Jacqueline.
Otras técnicas
En este apartado se incluyen dos obras que son muestra de la absoluta libertad del trabajo de Picasso, siempre capaz de experimentar con nuevos materiales y las técnicas artísticas más diversas.
Se trata de una caja de útiles de peluquería pirograbada con escenas de tauromaquia, especialmente destinada al trabajo del peluquero y una placa de cagafierro, realizada a partir de desperdicios de material de hierro triturados, que representa el pájaro del progreso, regalada a Eugenio Arias para decorar su nuevo salón de peluquería en Vallauris.
Otros autores
La Colección Arias guarda además objetos de artistas amigos de Picasso: fotografías de André Villers, quien junto con los fotógrafos David Douglas Duncan y Edward Quinn documentó la vida de Picasso en su casa-taller de La Californie y un busto de Picasso firmado por F. Aguilar.
Picasso mandó hacer dos bronces a partir de la escayola que le presentó el escultor: uno para éste y otro para Arias.